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Bodegas Otazu - el arte y el bien vivir

Bodegas Otazu: El arte y el bien vivir

Las Bodegas Otazu son una de las bodegas más prestigiosas del norte de España, donde el arte está siempre presente.

En la entrevista Guillermo Penso, CEO de Bodegas Otazu, nos ha dicho que este proyecto “tiene tres ejes, que son una síntesis de lo que transmite Otazu: vino, arte e historia“. Estos son los ingredientes que se ensamblan para crear una experiencia única”.

Guillermo Penso también nos ha hablado de la importancia de las exportaciones que representan un 85% del total de su producción, estando presente en 42 países. Y aún hubo tiempo para hablar de Otazu Wine Bar, que fue inaugurado en 2019 en Venezuela.

Bodegas Otazu y el Arte

¿Cómo surge la idea de combinar el arte del vino con extraordinarias esculturas de arte contemporáneo?

Aparece de forma lógica. En primer lugar, porque son pasiones naturales y, también, porque encajan en la manera en la que entendemos nuestro proyecto. Tanto el arte como el vino, parafraseando a un artista muy querido por nosotros, Carlos Cruz-Diez (1923-2019), comparten dos elementos que los definen: “Los imponderables y el asombro”. La siembra, el clima, las lluvias son los imponderables de cada vendimia. Nadie sabe qué sucederá. Pero teniéndolo en cuenta, y al igual que un artista entiende su trabajo, hay que hallar una solución final para que el producto, el vino, genere el asombro. Ambas lógicas son complementarias.

Más que una galería al aire libre, el Señorío de Otazu parece un museo que redescubre la historia y los sentimientos del buen vivir. ¿Estás de acuerdo?

Totalmente. Nosotros más que de una bodega, hablamos siempre de proyecto. Tiene tres ejes, que son una síntesis de lo que transmite Otazu: vino, arte e historia. Estos son los ingredientes que se ensamblan para crear una experiencia única.

¿Puede el arte atenuar los momentos menos buenos en la sociedad, como lo fue la pandemia del covid-19?

El arte tiene la gran nobleza de salirse de la lógica utilitaria para situarse en el plano de lo sublime. En este sentido, conecta con lo más profundo de un nuestro ser y esa virtud es, quizá, la más importante en los momentos difíciles, que, por lógica humana, nos empujan hacia atrás y a refugiarnos en nosotros mismos. El arte es lo contrario. Un puerto abierto cuando los vientos más arrecian.

Los espacios del Señorío de Otazu suelen ser escenario de formación en diseño y arte. ¿Es importante ser parte de la comunidad local?

Resulta esencial. Los proyectos se construyen con personas que forman parte, en la mayoría de las ocasiones, del tejido local. Uno puede tener una profunda vocación global, como es la nuestra, sin desarraigarse. Seguir presente en la cercanía. En el caso de las bodegas, y muy especialmente de Otazu, cuyo Señorío alcanza ya 900 años de historia vitivinícola, su singularidad geográfica, que supone algo propio, es lo que permite a las uvas expresarse de una manera tan especial.

“Tiene tres ejes, que son una síntesis de lo que transmite Otazu: vino, arte e historia. Estos son los ingredientes que se ensamblan para crear una experiencia única”

Guillermo Penso, CEO de Bodegas Otazu

¿Cuáles fueron los impactos de la pandemia en Bodega Otazu y todos los demás servicios que ofrece?

Las bodegas que tienen la calificación de Pago, como la nuestra, en donde los viñedos son propios, han tenido un impacto asimétrico en su día a día. Por un lado, la mayoría de nuestros clientes de hostelería -principal canal de distribución para nosotros-  están cerrados. Pero, a la vez, el campo no entiende de pandemias. En nuestro caso, además, al ser “productores de experiencias”, la repercusión ha sido aún mayor porque resulta fundamental la presencia del ser humano y esto ha chocado contra las enormes restricciones de movilidad.

La relevancia de la internacionalización

¿Hubo una nueva definición de política de internacionalización con la pandemia?

Quizá para el sector español del vino, donde el 80% estaba destinado al consumo local si. Pero ese no es nuestro caso. Estamos presentes en 42 países que representan cerca del 85% de nuestra actividad. Además tenemos oficinas propias en China, Venezuela y estamos en proceso de abrir nuestra oficina en México. La pandemia ha evidenciado el acierto de esta estrategia.

Y en Portugal. ¿Cómo es este mercado para la estrategia de internacionalización?

Guillermo Penso – CEO de Bodegas Otazu

Portugal, como todos los países productores de vino, es un espacio muy complicado para la entrada de vino extranjero. No obstante, debido a su cercanía geográfica y cultural es un mercado en el que nos interesa mucho profundizar. Y así lo haremos.

Cuando lleguemos a “tiempos normales”, ¿podría producirse un cambio significativo en los hábitos de los consumidores de vino?

Yo creo que más que un cambio habrá una evolución. España, y esto ha sido muy positivo, ha redescubierto que el vino es una bebida que se puede disfrutar en casa al margen de la restauración.  Igualmente durante la pandemia hemos comprobado que el vino no es un producto de lujo para ser consumido en celebraciones y salidas, sino por el contrario es un elemento que forma parte de nuestras visas como un catalizador de experiencias y emociones aunque estemos en nuestras casas.

Isabel Mijares dijo en su entrevista para Raia Diplomática sobre los hábitos de consumo de vino en España: “Hemos hecho creer al hombre de la calle que para beber vino tiene que ser doctor, y tener unos conocimientos exhaustivos de enología, y como le da miedo y el español es orgulloso… consumía menos”. ¿Debería asociarse el consumo más con la experiencia y menos con el “elitismo”?

Totalmente de acuerdo con las acertadas palabras de María Isabel. Una de las grandezas del vino es lo infinito de su universo, en el que pueden disfrutar tanto el aficionado como el experto. Mas aún resulta interesante que todo aficionado es un experto en potencia y a través de formación y ensayo y error ese conocimiento le llevará a disfrutar aún más de la experiencia del vino.

Otazu Wine Bar

En 2019 Bodega Otazu abrió su primer Wine Bar. ¿Por qué Venezuela fue el primer país en recibir este nuevo segmento de su negocio y no España, donde se encuentran sus viñas y elaboran?

Una de las principales razones es que tenemos una firma importadora propia en Venezuela desde hace casi 20 años, por lo que contamos con un profundo conocimiento del mercado y de la demanda del consumidor de ese país. En nuestra experiencia, tener un equipo propio dedicado en exclusiva a comercializar y divulgar nuestros vinos hace una diferencia sustancial a la hora de crear marca.

¿Quiere replicar Otazu Wine Bar en otras ciudades del mundo?

Es un modelo muy interesante. Nos permite trasladar la experiencia de catar nuestros vinos más allá de la propia bodega, solventando de esta manera nuestro mayor obstáculo que es trasladar al consumidor la “experiencia Otazu”. En términos de expansión actualmente en Guangzhou, China tenemos un showroom con planes de convertirlo en un Otazu wine bar. Por otro lado el año que viene tenemos previsto abrir un Txoko de Otazu en la ciudad de México.

¿Con o sin Otazu Wine Bar,… qué vinos recomienda Otazu para un reencuentro entre amigos?

La propuesta de Otazu es resaltar las singularidades de nuestro terroir, que contiene unos 70 viñedos con características diferentes. Este terruño tan único explica por qué tenemos una gama de casi 15 vinos distintos. Caldos que nacen con personalidades diferentes pero que, como buenos hermanos, comparten un elemento en común: el clima. ¿Mi recomendación? Probar distintos vinos hasta hallar ese que resuene, que produzca un eco más intenso, en nuestros gustos y expectativas. En mi caso por ejemplo yo suelo asociar los vinos a diferentes momentos de la visita. Cuando viene un grupo usualmente comienzan su visita con una copa de vino de la gama de los Otazu ya sea el Premiun Cuvée, el Chardonnay o alguno de los rosados. Luego en el momento de la cata, con un pequeño picoteo, la gama de los vinos de pago suele de ir de maravilla. Por último, para la comida suelo pensar en las gamas más altas y vinos más estructurados como el AS, Altar o el 1 ha Garnacha.

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