Nicaragua, maravilloso país multiétnico, pluricultural y multilingüe, no solo se destaca por su riqueza cultural y tradiciones inalterables al paso del tiempo, sino también por sus hermosos paisajes naturales, entre los que sobresalen playas, volcanes, bosques, ríos, lagos, y montañas que cautivan a los miles de turistas que anualmente la visitan.
Descubre increíbles y bellos lugares, destinos turísticos únicos que valen la pena visitar en esta Tierra de Lagos y Volcanes. Si estás en búsqueda de un plan para reconectar con la naturaleza, asómbrate con los hermosos atractivos que ofrece la Ruta del Agua. Disfruta de un mágico recorrido de 238 kilómetros a lo largo del lago Cocibolca, (el segundo más grande de Centroamérica), y el caudaloso río San Juan.
Practica diversas actividades en sus más de 7,540 kilómetros cuadrados. Anímate a hacer senderismo, rapel, paseos a caballos, y navega sobre las aguas de uno de los ríos más grandes del país, en esta región con mucha biodiversidad.
Asómbrate y disfruta de la naturaleza en su estado puro, mientras descubres su importancia histórica, cultural, y científica. Estamos seguros que será una experiencia inolvidable.
La aventura empieza en el municipio de San Carlos, al sureste del país, pasando por el archipiélago de Solentiname, cuna de la pintura primitivista nicaragüense; para posteriormente visitar El Castillo de la Inmaculada Concepción, un fuerte militar construido en la época colonial en el siglo XVII, hasta concluir en la antigua ciudad de Greytown y San Juan de Nicaragua, en la desembocadura del río en el mar Caribe.
Durante el recorrido podrás admirar parte de la Reserva Indio Maíz, una de las reservas naturales mejor conservadas, con más de 3,157 kilómetros cuadrados y considerada por los científicos uno de los ecosistemas más ricos y diversos del mundo.
Otro sitio interesante sobre esta ruta turística es la Reserva Natural Bartola, estación biológica sobre el río San Juan, a media hora de El Castillo de la Inmaculada Concepción, en el confluente de los ríos Bartola y el Río San Juan, con vegetación de tipo bosque húmedo de la baja altitud.
Son 450 hectáreas, ubicadas en la zona de amortiguamiento de la Reserva Biológica Indio Maíz, eslabón importante del Corredor Biológico Mesoamericano. La zona, en términos geológicos corresponde a la Era Cuaternaria y pertenece a la porción del continente que emergiera de manera tardía.
Su bosque húmedo tropical es el más extenso del área y se encuentra en diferentes estados de conservación. La cobertura boscosa cubre actualmente más de 90% del refugio, con vegetación de pantanos que se encuentran en áreas mal drenadas junto al río San Juan.
También podes visitar el Refugio de Vida Silvestre Los Guatuzos, constituida por sabanas anegada de árboles y palmas, bosque latifoliados y pantanosos, su exuberante vegetación la conforman diferentes tipos de ecosistemas que abarcan lagunas, humedales, bosque seco y húmedos.
Aquí podrás disfrutar de su fauna de más de 385 especies de aves acuáticas que forman la concentración más grande de Nicaragua y Centroamérica, siendo el refugio un punto importante para la migración de aves de norte a sur del continente, también tiene una gran cantidad y variedad de otras especies de animales, muchos de ellos en peligro de extinción.
Durante el recorrido podrás admirar parte de la Reserva Indio Maíz, una de las reservas naturales mejor conservadas, con más de 3,157 kilómetros cuadrados y considerada por los científicos uno de los ecosistemas más ricos y diversos del mundo
Ahora tenemos una cita con la historia. La Fortaleza de la Inmaculada Concepción de María, ubicada a 60 km del municipio de San Carlos es un atractivo turístico por su belleza escénica y su importancia histórica.
Construida en la época colonial, en 1672, para proteger a Nicaragua de los ataques de los piratas que se dirigían a saquear la ciudad de Granada, es una edificación militar ubicada de forma estratégica sobre la cima de una colina. Aquí, Rafaela Herrera, de tan solo 19 años, defendió la fortaleza detrás de un cañón, hundiendo una nave invasora de los ingleses.
Los turistas que visitan la fortaleza pueden explorar su interior y recorrer su interesante museo, que ayuda a comprender la importancia que tenía en su época la fortificación. Puedes quedarte en los distintos alojamientos del pequeño poblado, practicar la pesca, o tomar un paseo en canoa para disfrutar la verdadera magia de la selva húmeda tropical.
En el Archipiélago de Solentiname, ubicado en el extremo sur-este del lago Cocibolca, se conjuga la naturaleza y la cultura. Este grupo de 36 bellas islas e islotes de origen volcánico, son un destino de gran riqueza natural, cultural e histórica, por lo que fue declarado área protegida, con categoría de Monumento Nacional.

Este archipiélago es la cuna de una cultura precolombina de la que aún pueden observarse una gran cantidad de petroglifos, con figuras de pájaros, monos o personas. En las islas se han encontrado numerosas piezas arqueológicas precolombinas que son exhibidas en los museos de las islas Mancarrón y San Fernando.
Sus principales actividades económicas son la agricultura, la pesca artesanal, la pintura primitivista, la artesanía y el turismo. En sus aguas se encuentran tiburones de agua dulce y otras especies marinas que habitan tanto el lago Cocibolca como el río San Juan.
Los visitantes pueden aprender a elaborar piezas de artesanía primitiva, en madera balsa, o alquilar kayaks para disfrutar de las aguas del lago. Es el sitio ideal para relajarte, disfrutar de una buena lectura, la contemplación y meditación.
Nuestro último destino es la Reserva Biológica Indio Maíz, considerada una de las reservas naturales mejor preservadas del país. La reserva comprende 3180 km² y es el hogar de una amplia variedad de animales de la selva. Entre ellos la habitan cientos de especies de aves, incluyendo tucanes, guacamayas, colibríes y loros. En la zona también habitan mamíferos, tales como venados, perezosos, jabalíes, pumas, jaguares, pacas, zorros e incluso manatíes, además de las tres especies de monos que viven en el país (mono congo, cara blanca y mono araña). Asimismo, se pueden encontrar ranas venenosas, serpientes, cocodrilos, tortugas e iguanas.
Sin ninguna duda es un lugar imprescindible para los amantes de la observación de fauna.
Para entrar a la reserva es necesaria la compañía de un guía, y debido a que es una selva tropical, los repelentes, botas fuertes y capotes son necesarios. Los viajes a la reserva pueden ser organizados con los guías de El Castillo o en los hoteles del pueblo Boca de Sábalos.
Este itinerario es perfecto para los turistas deseosos de la experiencia del turismo rural, conocer sobre las diversas especies de flora y fauna, el avistamiento de aves, y las actividades de agroturismo como la interacción con animales de granja.
Estos maravillosos rincones te desconectarán de la vida diaria. Te invitamos a descubrir estos tesoros escondidos que harán tu aventura inolvidable.
Instituto Nicaragüense de Turismo
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