Desde una perspectiva histórica, el Mar Negro y sus zonas colindantes han desempeñado siempre un papel importante en la política europea, euroasiática y de otros continentes, en la confluencia de Asia y Europa, Occidente y Oriente. A lo largo de los siglos, la región ha sido testigo de constantes interferencias y conflictos entre distintos imperios y potencias. En los últimos 30 años, la región ha experimentado una nueva serie de grandes cambios que la han situado en primera línea del escenario mundial, con implicaciones geopolíticas cada vez más directas y relevantes. Con el final de la Guerra Fría, las realidades político-militares configuradas después de 1945 han sufrido importantes transformaciones como consecuencia de la desintegración de la Unión Soviética, la recomposición de los equilibrios de poder y los procesos democráticos desencadenados de forma natural en los Estados de la región. Rumanía, con su antigua forma de nación en el sureste de Europa, logró su independencia e integridad como Estado en 1918, convirtiéndose en uno de los actores regionales más relevantes, un perfil reconfirmado y reforzado en el contexto actual. Con su posición estratégica y su tradición históricamente consistente, Rumanía desempeña un papel destacado en la estabilidad y la seguridad de la región. Este artículo pretende esbozar brevemente el peso de Rumanía en el actual marco regional y europeo, así como sus intereses y su potencial para influir en la política europea y mundial.
Desde la caída del régimen comunista en 1989, Rumanía ha demostrado su capacidad para llevar a cabo importantes transformaciones como Estado y como actor regional e internacional. Ha realizado un esfuerzo claro y fructífero para fortalecer su democracia y su economía, establecer relaciones sólidas con sus vecinos y socios europeos y atlánticos, y promover la seguridad y la estabilidad en la región. No es casualidad que con la adhesión de Rumanía a la OTAN en 2004, la atención e implicación de la OTAN en la región del Mar Negro haya aumentado exponencialmente, adquiriendo la zona nuevas dimensiones de seguridad y cooperación, reflejadas en su compromiso político e implicación militar en respuesta a la creciente amenaza de Rusia.
Desde el punto de vista político, la región ha evolucionado sucesivamente de un interés de seguridad euroatlántico a un componente importante de la seguridad euroatlántica y ahora a una zona de interés estratégico para la seguridad euroatlántica, hecho confirmado también por primera vez en la historia de la Alianza por el nuevo Concepto Estratégico de la OTAN adoptado en 2022.
Paralelamente, la región se ha convertido en parte integrante del proceso de análisis y planificación de los Aliados, con el resultado de que la presencia y grado de implicación de los países miembros de la OTAN en la región no tiene precedentes como parte integrante del planteamiento unificado y coherente sobre el Flanco Oriental. Rumanía alberga estructuras multinacionales de fuerzas y capacidades, estructuras de mando y control y una presencia reforzada. Todo esto es una realidad que responde a un hecho: el Flanco Oriental y en especial la región del Mar Negro son los más expuestos a las acciones agresivas de Rusia, la amenaza más grave y directa a la que se ha enfrentado la Alianza desde el final de la guerra fría.
Todo esto no habría sido posible sin una estrecha cohesión y una fuerte solidaridad a nivel aliado. España, ella misma un Estado del flanco de la OTAN, comprendió la importancia de los esfuerzos conjuntos en apoyo de la seguridad. La contribución de este país al reforzamiento de la disuasión y la defensa en el flanco oriental es innegable: desde las misiones de policía aérea hasta la presencia militar en maniobras conjuntas, desde la participación en el flanco hasta las aportaciones al sistema de defensa antimisiles de la OTAN, del que Rumanía también es un importante contribuyente, todo ello demuestra claramente el estrecho vínculo existente entre Rumanía y España.
Del mismo modo, en la Unión Europea, desde 2007, tras la adhesión de Rumanía, el Mar Negro ha aumentado y confirmado su relevancia como zona de gran interés para las instituciones y los Estados europeos, y más allá. También es importante tener en cuenta que el río Danubio, el segundo más largo de Europa después del Volga, desemboca en el Mar Negro en territorio rumano y es un importante puente que une nada menos que a diez países europeos. El Mar Negro y la región adyacente también tienen una importancia económica significativa.
Rumanía desempeña un papel importante en el actual marco geopolítico regional y europeo y tiene cada vez más capacidad y potencial para influir en la evolución de la región. Su posición estratégica en el Mar Negro, su pertenencia a la Unión Europea y a la OTAN, su economía en crecimiento y su estabilidad política hacen de Rumanía un socio clave para desarrollar corredores de transporte y energía, promover la seguridad y la estabilidad en la región e influir en la dirección política de la región del Mar Negro en un sentido positivo y europeo
George Bologan, Embajador de Rumanía en España
Como miembro de la Unión Europea y de la OTAN, Rumanía desempeña un papel crucial en la estabilidad y seguridad de la región del Mar Negro. Su posición estratégica la convierte en un socio clave en el desarrollo de los corredores de transporte y energía, y su prestigiosa pertenencia y demostrable influencia en las principales organizaciones internacionales la convierten en un verdadero participante en los debates y negociaciones sobre cuestiones de gran importancia regional y europea. No menos relevante, la economía de Rumanía, con una de las tasas de crecimiento más altas de la UE, así como su estabilidad política, la convierten en un socio atractivo para la cooperación y la integración regionales. Quizá lo más importante sea su importante potencial en el sector energético, con recursos naturales como el gas natural y la energía nuclear, que le permiten desempeñar un papel clave en la seguridad energética europea.
Bucarest acogió los días 6 y 7 de septiembre la reciente Cumbre y Foro Empresarial de la Iniciativa de los Tres Mares 2023, un acontecimiento cada vez más importante para la UE, la zona del Mar Negro y la región de Europa Central y Oriental. Esta iniciativa de cooperación de las regiones del Báltico, el Mar Negro y el Mar Adriático reúne a trece países, con la adhesión de Grecia, para reforzar la cooperación estratégica y la inversión en ámbitos clave como la energía, el transporte y las infraestructuras, en aras de la reducción de las disparidades de desarrollo en la UE y la cohesión transatlántica.
La reunión de Bucarest fue un acontecimiento de alto nivel al que asistieron dirigentes y representantes de los países miembros, así como socios y observadores internacionales; los nuevos miembros más significativos fueron la República de Moldavia y Ucrania. Se debatieron una serie de ámbitos con implicaciones estratégicas muy tangibles, en torno a los cuales se construyen y construirán cada vez más proyectos: infraestructuras, fomento del comercio y la inversión, seguridad energética.
Se debatieron los principales retos y oportunidades de la región. En palabras del Presidente rumano, Klaus Iohannis, en la reunión de Bucarest: “Me alegro de que esta nueva edición de la Cumbre de Bucarest contribuya a reforzar la importancia estratégica de la región del Mar Negro, cuyo peso estratégico ha aumentado, desde 2018, en relación con Europa y los socios transatlánticos. […] En este complicado marco estratégico, la Iniciativa ha adquirido un nuevo nivel de relevancia: una mejor conectividad conduce a una mayor resiliencia. […] En este contexto, Rumanía ha actuado para aumentar la concienciación internacional sobre el papel estratégico de la región y la importancia de la Iniciativa de los Tres Mares. Hemos visto y gestionado un creciente interés por la iniciativa, tanto por parte de los socios de la región que comparten la misma visión como del resto del mundo.
“Rumanía tiene una serie de intereses claros en el contexto geopolítico actual. Uno de ellos es promover y garantizar la seguridad y la estabilidad en la zona del Mar Negro. Rumanía ha acogido numerosas maniobras militares conjuntas con la participación de España y otros aliados de la OTAN. Estos ejercicios, que incluyen maniobras terrestres, aéreas y marítimas, tienen como objetivo mejorar la preparación y capacidad de reacción de las fuerzas armadas en escenarios realistas. También fomentan la cooperación y el intercambio de conocimientos entre los ejércitos de todos los países participantes. Rumanía también se ha comprometido a promover los valores democráticos y los derechos humanos en la región, en cooperación con sus socios internacionales.
Citando de nuevo las palabras del Presidente Iohannis: “En este contexto, reiteré el apoyo de Rumanía a Ucrania y a sus ciudadanos, tanto a través de planteamientos bilaterales como multilaterales, que también transmití directamente al Presidente Zelenski durante la visita que realizó a Kiev. Como anfitriona de la Cumbre, Rumanía explorará todas las posibilidades a través de las cuales la Iniciativa puede ayudar a Ucrania. En particular, nos centraremos en los proyectos de interconexión, en los que Ucrania podría participar como socio de la Iniciativa.”
Rumanía ha demostrado plenamente su compromiso con la cooperación regional y la integración europea. Ha colaborado estrechamente con sus vecinos para reforzar la cooperación en ámbitos como la seguridad, el comercio y las infraestructuras. Rumanía ha apoyado activamente la ampliación de la UE en los Balcanes Occidentales, reconociendo la importancia de la estabilidad y la integración en la región. Ha prestado un apoyo significativo a Moldavia, Estado vecino con el que mantiene lazos históricos, culturales y lingüísticos indisolubles. Este apoyo se ha centrado en áreas clave como el desarrollo económico, la estabilidad energética, el desarrollo institucional y la integración europea de la República de Moldavia. Rumanía es uno de los principales socios comerciales de Moldavia, al que proporciona asistencia financiera y técnica para promover el crecimiento económico y el desarrollo sostenible. Asimismo, en apoyo de los esfuerzos de Moldavia por avanzar en el proceso de integración europea, Rumanía ha tomado medidas constantes para compartir su experiencia en el proceso de adhesión y proporcionar asesoramiento en ámbitos como la armonización legislativa y la aplicación de las normas y estándares europeos.
En conclusión, Rumanía desempeña un papel importante en el actual marco geopolítico regional y europeo y tiene cada vez más capacidad y potencial para influir en la evolución de la región. Su posición estratégica en el Mar Negro, su pertenencia a la Unión Europea y a la OTAN, su economía en crecimiento y su estabilidad política hacen de Rumanía un socio clave para desarrollar corredores de transporte y energía, promover la seguridad y la estabilidad en la región e influir en la dirección política de la región del Mar Negro en un sentido positivo y europeo.

George Bologan es Embajador de Rumanía en España. En 2003 ingresó en el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rumanía, en principio como empleado y enviado a la Embajada de Rumanía en Italia, donde ocupó el puesto de agregado cultural. Continuó su misión diplomática en el Consulado General de Rumanía en Milán como Cónsul Delegado para la Expo 2015, asuntos culturales y relaciones con la comunidad rumana.
Es profesor asociado en la Universidad Occidental de Timișoara – Facultad de Ciencias Políticas.
Trabajó como periodista para los distintos periódicos de prensa escrita y radiofónica y televisiva en Rumanía e Italia, estando acreditado como vaticanista en la Oficina de Prensa de la Santa Sede (1995-2003).
Publicó diversos ensayos sobre la antropología y la espiritualidad del mundo contemporáneo. A lo largo del tiempo, como invitado, en varias conferencias en Universidades de Roma (“La Sapienza”, Roma3, LUMSA), en el Colegio Nacional de Defensa de Rumanía, en la Universidad de Oradea, en la Universidad “Babes Bolyai” de Cluj-Napoca.
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